Impacto de la inteligencia artificial en nuestros hijos
Como continuación de nuestro artículo Inteligencia Artificial ¿Qué es y qué puede suponer para nuestros hijos?, os ofrecemos este nuevo artículo donde profundizamos más en los beneficios que puede tener esta herramienta, pero también de los posibles peligros potenciales que puede acarrear y qué podemos hacer para proteger a nuestros hijos de los mismos.
El uso de la inteligencia artificial (IA) en la educación ofrece numerosos beneficios, ayudando a transformar la forma en que los estudiantes aprenden y los educadores enseñan.
1. ALGUNOS DE LOS PRINCIPALES BENEFICIOS SON:
a) Personalización del aprendizaje
La IA puede adaptarse al ritmo, estilo y necesidades individuales de los estudiantes, ofreciendo materiales de aprendizaje personalizados.
Las plataformas basadas en IA pueden identificar las fortalezas y debilidades de los estudiantes y ajustar el contenido para enfocarse en las áreas que requieren más atención.
b) Automatización de tareas administrativas
La IA puede encargarse de la automatización de tareas administrativas repetitivas, como la calificación automática de exámenes, la gestión de asistencia y la organización de calendarios, lo que permite a los educadores dedicar más tiempo a la enseñanza y la interacción directa con los estudiantes
c) Acceso a recursos educativo avanzados
La IA facilita el acceso a contenido educativo multimedia, como simulaciones interactivas, videos explicativos y experiencias de realidad virtual, enriqueciendo así el aprendizaje.
También puede proporcionar recomendaciones de libros, artículos y otros materiales basados en el progreso del estudiante. No obstante, debes revisar y filtrar, junto con el profesor dichas recomendaciones.
d) Tutoría virtual y asistencia durante las 24 horas de los 7 días de la semana
Los sistemas de tutoría impulsados por IA pueden ofrecer apoyo a los estudiantes en cualquier momento, respondiendo preguntas y ayudando con los deberes. Estas fuentes deben ser revisadas por los padres y profesores.
Los chatbots educativos (“robots” basados en Inteligencia Artificial) pueden simular la interacción con un tutor en tiempo real, ofreciendo explicaciones y ejemplos adicionales. También bajo vuestra supervisión y la del profesor.
e) Apoyo en la enseñanza inclusiva
La IA puede ayudar a los estudiantes con necesidades especiales al ofrecer herramientas de aprendizaje adaptativo, como conversión de texto a voz, traductores en tiempo real y muchas otras.
También permite a los docentes identificar patrones que indican dificultades de aprendizaje, permitiendo intervenciones tempranas.
f) Análisis y seguimiento del rendimiento académico
Los algoritmos de IA pueden analizar el rendimiento de los estudiantes para detectar tendencias, predecir el riesgo de abandono escolar y sugerir estrategias de mejora.
El análisis de datos ayuda a los educadores a ajustar los métodos de enseñanza basándose en la evidencia científica.
g) Fomento del aprendizaje autónomo
La IA impulsa el autoaprendizaje al proporcionar herramientas que los estudiantes pueden utilizar de manera independiente para resolver problemas y explorar temas de interés.
Esto promueve habilidades como la curiosidad, la resolución de problemas y el pensamiento crítico.
h) Reducción de barreras lingüísticas
Las tecnologías de traducción automática y los asistentes de idiomas basados en IA facilitan el acceso a contenido educativo en diferentes idiomas.
Permite también la integración de estudiantes internacionales y facilita el aprendizaje de nuevos idiomas.
El uso de la IA en la educación no solo optimiza la eficiencia, sino que también enriquece el proceso de enseñanza-aprendizaje, haciéndolo más dinámico y accesible para todos.
2. EL USO DE LA INTELIGENCIA ARTIFICIAL (IA) POR PARTE DE NIÑOS Y JÓVENES SIN CONTROL NI SUPERVISIÓN PUEDE PRESENTAR VARIOS PELIGROS SERIOS:
a) Acceso a contenido inapropiado
La IA puede facilitar el acceso a contenido no apto para menores, o que promueva comportamientos peligrosos.
Sin la adecuada supervisión, los menores podrían llegar a contenidos que no son seguros o apropiados para su edad.
b) Manipulación y desinformación
Los algoritmos de IA pueden ser utilizados para crear noticias falsas o información engañosa.
Los niños y jóvenes pueden tener dificultades para distinguir entre información real y manipulada, lo que podría afectar sus creencias, valores y toma de decisiones.
c) Ciberacoso y abuso en línea
Las plataformas basadas en IA, como redes sociales o servicios de mensajería, pueden ser utilizadas para fraude, acoso y grooming.
La IA puede utilizarse para el fraude, creando imágenes o videos falsos o engañosos.
También para la clonación de voz de adultos acosadores o pedófilos, que pueden llevar al acoso en línea y a situaciones de chantaje sexual.
Todo esto conlleva serios y peligrosos riesgos para los menores, que podrían afectar a su salud mental y emocional.
Por todo ello, y lo reiteramos una vez más, podría afectar a su salud mental y emocional. Los padres y educadores debéis estar alerta y educar a vuestros hijos sobre estos peligros reales, así como mantener una comunicación y supervisión constantes.
d) Invasión de publicidad no deseada.
La condición omnipresente de la inteligencia artificial en internet se traduce en un constante seguimiento y recolección de datos sobre nuestras preferencias, tomando nota de lo que nos gusta y facilitándonos múltiples maneras de conseguir lo que queremos. Pudiendo convertirse nuestro historial de búsqueda o el de nuestros hijos en el objetivo de interminables e insistentes campañas publicitarias que pueden resultar inapropiadas y manipulativas, a las que preferiríamos que no tuvieran acceso.
e) Privacidad y seguridad de los datos
Muchas aplicaciones y dispositivos de IA son capaces de recopilar gran cantidad de información y datos sobre los usuarios, a menudo sin nuestro conocimiento, incluyendo a los niños.
Si los niños no entienden los riesgos, podrían compartir información sensible que podría ser explotada por ciberdelincuentes.
f) Aislamiento social
El uso excesivo de dispositivos que emplean IA puede llevar a que los jóvenes prefieran interactuar en línea en lugar de cara a cara con otras personas, generando aislamiento social.
El contacto frecuente con los demás es crucial para su adecuado desarrollo emocional y social y la falta o reducción del mismo podría afectar a sus habilidades sociales y a su desarrollo emocional.
g) Desarrollo de adicciones tecnológicas
Las aplicaciones y juegos que usan IA están diseñados para captar la atención de los usuarios durante el mayor tiempo posible.
Esto puede generar adicción, caracterizada por aislamiento social, dificultades en el rendimiento escolar, problemas de atención y concentración, trastornos del sueño, reducción del tiempo dedicado a otras actividades importantes, como el estudio, el deporte o la interacción familiar y social.
En estos casos, los psicólogos observamos con frecuencia en niños y jóvenes verdaderos “síndromes de abstinencia” (irritabilidad, cambios en el estado de ánimo, nerviosismo y agitación, negación de la dependencia a las pantallas, y un largo etcétera) cuando son privados de sus dispositivos.
h) Fomento de estereotipos y sesgos de información, difundiendo los prejuicios y la desinformación.
Puede promover estereotipos y prejuicios que alinean y dividen a las personas. Los adultos deben estar atentos y preparados para hablar con los niños sobre cómo discernir y cuestionar la información en línea que refuerza creencias erróneas y la desinformación.
I) Riesgos para la salud mental
El uso constante de IA, especialmente en redes sociales, puede afectar la autoestima y la salud mental de los jóvenes. La exposición a imágenes idealizadas o comparaciones sociales puede generar ansiedad, depresión o problemas de imagen corporal.
j) Falta de creatividad
Si el uso de la IA se generaliza y siempre se recurre a ella para resolver problemas o hacer tareas, a la larga se verá mermada la creatividad. Se pensará menos ya que nos lo dan todo hecho y el cerebro se irá “atrofiando” del poco uso.
La creatividad es una habilidad básica para la supervivencia y la adaptación al medio. Nos permite afrontar dificultades encontrando soluciones novedosas y a relacionarnos mucho mejor con el medio que nos rodea. Aunque la creatividad es innata al ser humano, si no se ejercita acaba por desaparecer y la IA puede convertirse en una de las principales causantes.
3. ¿QUÉ PODEMOS HACER LOS PADRES PARA REDUCIR LOS EFECTOS NEGATIVOS EN NIÑOS Y ADOLESCENTES DEL USO DE LA IA?
Enseñar a los niños y adolescentes a comprender cómo funciona la IA y sus limitaciones. Manteniendo comunicación y supervisión constante con ellos.
Explicarles que no todas las respuestas generadas por IA son precisas o apropiadas.
Fomentar el pensamiento crítico para que cuestionen la información que ven en internet y sepan identificar contenidos potencialmente dañinos o falsos.
b) Limitar el tiempo de pantalla
Establecer límites en el tiempo que pasan en dispositivos electrónicos, especialmente en actividades relacionadas con la IA.
Fomentar actividades y promover hobbies que no involucren el uso de tecnología como: deportes, actividades al aire libre, juego con otros compañeros, lectura o actividades artísticas.
c) Supervisar el uso de dispositivos y aplicaciones
Mantener un seguimiento del contenido y aplicaciones que usan los niños, especialmente aquellas que emplean IA para personalizar contenido.
Hay que estar especialmente atentos a las redes sociales y plataformas de streaming.
Configurar controles parentales para filtrar contenido inapropiado y limitar el acceso a ciertas aplicaciones o sitios web. Próximamente os ofreceremos un artículo con un listado de aplicaciones seguras para el control parental.
d) Fomentar el diálogo sobre la IA y sus riesgos
Conversar regularmente con los niños sobre su experiencia en línea y cómo interactúan con la tecnología basada en IA.
Hablar sobre los riesgos asociados, como la privacidad, la manipulación de la información, la adicción a la tecnología, el fraude y el acoso.
e) Proteger la privacidad y los datos personales
Enseñarles la importancia de no compartir información personal en línea y de ser cuidadosos con lo que publican en redes sociales o cualquier plataforma.
Utilizar configuraciones de privacidad adecuadas en dispositivos y aplicaciones para minimizar la recolección de datos personales.
f) Promover un equilibrio saludable de la vida real, manteniendo la digital en su proporción estrictamente necesaria.
Fomentar la interacción social cara a cara y las actividades en el mundo real, que ayudan a desarrollar habilidades sociales y emocionales.
Asegurarse de que el uso de la tecnología no interfiera con el sueño, los estudios o el ejercicio físico.
En el ámbito académico, fomentar el uso de la IA para aprender y no únicamente para que “nos lo den hecho” y no esforzarse.
Enseñarles a pensar, cuestionar y darle forma a lo que la IA nos proporciona.
g) Estar al tanto de las tendencias tecnológicas.
Los padres debéis de estar informados sobre las nuevas aplicaciones y tecnologías que están ganando popularidad entre los jóvenes.
Debéis también investigar cómo funcionan estas herramientas y los posibles riesgos que presentan, para estar preparados para orientar mejor a los hijos.
Al involucraros activamente en el uso que hacen vuestros hijos de la tecnología y promover un enfoque equilibrado, los padres podéis ayudar a minimizar los riesgos y maximizar los beneficios que la IA puede ofrecerles.
Resumiendo, para mitigar estos riesgos, es fundamental que los padres, educadores y cuidadores superviséis el uso de la IA y fomentéis el pensamiento crítico, además de establecer límites claros en cuanto a tiempo y contenido.
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