La aceptación: Un camino hacia la paz interior y el bienestar emocional
- Educamos en Familia
- 23 sept
- 3 Min. de lectura
¿Qué es la aceptación, qué beneficios tiene para nuestra salud mental y emocional y qué podemos hacer para desarrollarla?
La vida nos depara acontecimientos desagradables inesperados, pérdidas, muerte, enfermedad y un sinfín de cosas que no deseamos.
Es normal sentir dolor en estas situaciones, pero el sufrimiento es algo diferente, es algo que nos producimos nosotros mismos cuando rechazamos la realidad de la vida.

Te sorprenderá esta afirmación, pero es así y la ciencia y la práctica psicológica lo confirman cada día.
La forma en que respondemos ante la adversidad puede conducirnos a experimentar paz y bienestar o a acentuar y prolongar nuestro dolor.
Nuestra tendencia natural es rechazar nuestras emociones negativas y rumiar nuestras preocupaciones o pensamientos negativos. Lamentarnos y darle vueltas a lo que nos acontece cuando es algo que no deseamos, con la equívoca pretensión de que dándole vueltas encontraremos alguna solución o que rechazándolo desaparezca. Pero nada más equivocado
Podemos lamentarnos, rechazar la realidad, autocriticarnos por experimentar dichas emociones.
Pero existe otra forma de afrontar nuestras dificultades más eficaz y que nos depara importantes beneficios, la aceptación.
La aceptación de la realidad, tanto interna como externa es la habilidad de reconocer y admitir nuestras situaciones, experiencias, emociones, y pensamientos tal como son. Sin resistirnos, sin juzgarnos, ni criticarnos por no poder cambiarlos.
La aceptación es un componente fundamental de algunas corrientes espirituales, de diversas prácticas de bienestar y filosofías de vida, incluyendo la psicología positiva, la terapia de aceptación y compromiso (ACT), y la atención plena (mindfulness).
“Dame Dios mío fuerzas para cambiar lo que puedo cambiar, aceptación para lo que no puedo cambiar y sabiduría para distinguir la diferencia entre ambas cosas.”
Numerosas investigaciones han confirmado que aceptar las emociones y los pensamientos negativos (en lugar de juzgarlos o auto descalificarse por tenerlos) proporciona importantes beneficios para la salud psicológica.
Con el tiempo, la aceptación ayuda a estas personas a experimentar menos emociones negativas, a disfrutar de paz interior, bienestar emocional y mayor satisfacción con la vida, así como la reducción de la tristeza, la depresión, la ansiedad y el estrés.
Beneficios de la aceptación para la salud mental y emocional.
Reducción del estrés y la ansiedad: Al aceptar nuestras emociones y pensamientos tal como son, disminuimos la resistencia y la lucha interna, lo que reduce el estrés y la ansiedad.
Mejora del bienestar emocional: La aceptación permite una mayor conexión con el momento presente, lo cual es clave para un mayor bienestar emocional. El mindfulness y la meditación nos ayudan a vivir el presente. El escape y la evitación aumentan el dolor y lo hacen más perdurable.
Desarrollo de la resiliencia: Aceptar las dificultades y adversidades nos hace más fuertes y resistentes, nos ayuda a adaptarnos mejor a los cambios y a superar los desafíos de manera más efectiva.
Fomenta la auto-compasión: La aceptación incluye ser amable y comprensivo con nosotros mismos, lo que promueve una actitud de auto-compasión y reduce la autocrítica.
Mejora de las relaciones interpersonales: Aceptar a los demás tal como son, sin intentar cambiarlos, puede mejorar nuestras relaciones y fomentar una comunicación más abierta y honesta.

Cómo desarrollar la aceptación
Práctica de la atención plena (mindfulness): La atención plena implica observar nuestras experiencias internas y externas sin juzgarlas. Practicar mindfulness regularmente puede aumentar nuestra capacidad de aceptar el momento presente tal como es.
Auto-reflexión: Tomarse el tiempo para reflexionar sobre nuestras emociones y pensamientos, y reconocerlos sin juzgarlos, puede ser una herramienta poderosa para desarrollar la aceptación.
Diario de emociones: Escribir sobre nuestras emociones y experiencias diarias puede ayudarnos a entender y aceptar mejor nuestros estados internos.
Meditación: La meditación, especialmente las prácticas que se centran en la aceptación y la auto-compasión, puede ser muy beneficiosa.
Terapia: Trabajar con un terapeuta, especialmente en enfoques como la Terapia de Aceptación y Compromiso (ACT), puede ayudarnos a aprender técnicas y estrategias para aceptar nuestras experiencias.
Lectura y educación: Leer libros y artículos sobre la aceptación, la atención plena y la auto-compasión puede proporcionarnos conocimientos y estrategias de gran valor terapéutico.
Practicar la gratitud: Focalizarse en las cosas por las que estamos agradecidos puede cambiar nuestra perspectiva y ayudarnos a aceptar las cosas que no podemos cambiar.
Aceptar la imperfección: Reconocer y aceptar que la imperfección es parte de la naturaleza humana. Que no es una catástrofe equivocarse y cometer errores, por el contrario pueden ser una fuente de aprendizaje y crecimiento personal.
Desarrollar la aceptación es un proceso continuo que requiere práctica y paciencia. La ayuda de una comunidad o un guía de confianza puede ayudaros mucho.
Al integrarla en nuestra vida diaria, podemos experimentar una mejora significativa en nuestra salud mental, física y emocional.
En nuestra página puedes encontrar guía e información.